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Premiar y castigar: la clave para alcanzar la sostenibilidad ambiental

Impuestos e incentivos verdes Evitar que el planeta continúe calentándose dependerá de qué tan efectivos son los programas de incentivos e impuestos sostenibles. Mientras Europa lidera con un compromiso de ser carbono neutral para 2050, Estados Unidos da marcha atrás desde el último cambio de Gobierno. ¿Cómo avanza América Latina?


Los días en los que las prácticas sostenibles eran un acto de buena voluntad y cada quien hacía lo que estaba en sus posibilidades para no impactar el medio ambiente, quedaron atrás. Si el mundo quiere ganarle la batalla al calentamiento global son necesarias una serie de estrategias estandarizadas, reguladas y cuantificables que comprometan a todos, especialmente a los que más huella de carbono generan. Para evitar que el mundo se caliente unos grados hay que trabajar en equipo, tanto gobiernos como privados deben ir en una misma dirección con lineamientos globales que normen tanto prácticas verdes como sanciones para los infractores. En este contexto entran a figurar los impuestos e incentivos verdes y cabe la duda, ¿cuál es más efectivo? los impuestos son un estímulo negativo en el que los que más contaminan deben pagar, mientras que los incentivos premian a quienes están haciendo bien la tarea. Y en el dilema entre premiar y castigar, la respuesta es que ambas acciones son necesarias.

“Lo que hemos observado a lo largo de los años, al analizar diferentes regiones, es que una combinación de instrumentos tiende a ser más impactante y eficaz”, destacó Alenka Turnske, líder de Tributación Sostenible para Europa, Medio Oriente, India y África en EY.

“Se trata de una combinación de distintos mecanismos: regulación, impuestos, incentivos y esquemas de financiamiento, que cada país o región debe calibrar en función de sus necesidades específicas”, añadió Kasia Lewis, líder de Tributación Sostenible para Estados Unidos en EY, en entrevista con Forbes.

En qué dirección avanza el mundo

Europa ha liderado la conversación global sobre sostenibilidad. En el continente se gestó el Acuerdo de París, en 2015, y aunque ha perdido participantes relevantes como Estados Unidos y los expertos señalan que sus ambiciosas metas son difíciles de cumplir, sí sirvió como hoja de ruta para la generación de normativas sostenibles.

Actualmente, Europa se concentra en el Pacto Verde que busca que el Continente sea carbono neutro para 2050, la iniciativa presentada en diciembre de 2019 por la Comisión Europea, promueve una serie de impuestos e incentivos que aseguran que las empresas vayan en el camino correcto.

“La Unión Europea, el Reino Unido y otros países europeos tienden a preferir una combinación de estímulos. Ahora estamos pausando un poco el uso de impuestos y aumentando los incentivos, para ser un poco más compatibles con lo que está ocurriendo en Estados Unidos, y también en China, país que tiende a favorecer los subsidios en ciertas industrias estratégicas”, explicó Alenka Turnske.

La experta también señaló que cuando el Parlamento Europeo era de ideología centro-izquierda, la estrategia de estímulos era más agresiva, mientras que después del último periodo electoral, el nuevo grupo de centro-derecha protege más el negocio, sin dejar atrás los objetivos trazados.



Mientras tanto, Estados Unidos había hecho un avance relevante, especialmente gracias a su programa de incentivos que entregó aproximadamente US$400.000 millones durante la administración Biden. Sin embargo, el actual huésped de la Casa Blanca ha cambiado un poco las reglas de juego.

En su primer día como presidente, Donald Trump le impuso una pausa de 90 días a los fondos de la Ley de Reducción de la Inflación y la Ley de Inversión en Infraestructura y Empleos, las cuáles otorgan incentivos a proyectos de energías renovables.

La buena noticia es que a nivel estatal se están empezando a generar iniciativas, California, Nueva York y Vermont ya tienen sus propias normativas verdes. “Aunque el gobierno federal puede estar retrocediendo en algunos aspectos clave, los estados están avanzando de manera significativa”, explicó Kasia Lewis.

Asimismo, en las empresas no se ve la intención de dar un paso atrás. “De acuerdo con las conversaciones que tenemos con nuestros clientes, no están dando marcha atrás en sus estrategias de descarbonización o sostenibilidad”.

En Asia, países como China, Singapur, Tailandia, Vietnam e India también han desplegado iniciativas como impuestos al carbón, incentivos fiscales e inversión en proyectos de energías renovables. En África, aunque hay menos avances, hay referentes como Sudáfrica, con incentivos fiscales de hasta 125%, sobre el valor de los activos.

Según cifras del Banco Mundial, en 2023 se recaudaron más de US$140.000 millones en el mundo a través del impuesto al carbono, un alza significativa frente a los US$95.000 millones de 2022. Hoy existen 75 instrumentos de fijación de precios al carbono en el mundo, lo que representa aproximadamente el 24% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero.

El panorama regional

“Históricamente, la región ha preferido los impuestos. Pero si realmente quieren marcar una diferencia y dar un gran salto, necesitan inversión e incentivos. Esto crea una psicología positiva, fomenta el emprendimiento e impulsa la innovación. Es importante proteger una parte de la recaudación de impuestos y canalizar esos fondos hacia los incentivos”, explicó Alenka Turnske sobre América Latina.

Además, las expertas coinciden en que la región es significativamente atractiva para los inversionistas globales: hay minerales clave para el desarrollo de múltiples industrias, es el lugar con mayor diversidad de flora y fauna, su agricultura la convierte en la despensa del mundo y su riqueza forestal la hace el pulmón del planeta.


En países como Colombia ya está implementado el impuesto al carbono, recientemente entró en vigor el impuesto a las bolsas plásticas y se prohibió el uso de plásticos de un solo uso. Además, para los proyectos de energías renovables hay una deducción del 50% sobre el impuesto de renta y una exención de aranceles para la importación de maquinaria.

Aún con los avances, se hace necesario un paquete más robusto de incentivos que inviten a los emprendedores y empresarios a buscar oportunidades de negocios en industrias no contaminantes o proyectos encaminados a una transición energética responsable. Fuente: FORBES COLOMBIA https://forbes.co/2025/05/22/sostenibilidad/premiar-y-castigar-la-clave-para-alcanzar-sostenibilidad-la-ambiental



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